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Bienvenidos amables amigos y consecuentes lectores de nuestra................. COLUMNA DE PAPEL

Blog de Juan Yáñez, desde San Juan de los Morros, Venezuela....

LA FINALIDAD DEL PRESENTE BLOG ES PARA EXPRESAR IDEAS, COMENTAR LO QUE CONSIDERAMOS DIGNO DE ELLO Y HASTA PARA DECIR LO INCONVENIENTE SI FUERA NECESARIO...




CHAU MARADONA...

 Juan Yáñez

Publicado en el Diario La Antena de San Juan de los Morros, Venezuela el 01 de agosto de 2010



                                          Queridos amigos y consecuentes lectores,  el título que presenta  nuestra columna de esta semana, tiene alguna dosis de irreverencia, más no de irrespeto. El respeto es una condición suficientemente sine qua non y   más aún en estos tiempos de la Globalización, en que mostrarse irrespetuoso es una evidencia de la  vulgaridad más intolerable. Por ello es conveniente que la corrección y la cortesía estén siempre presentes en nuestras expresiones, para dar el trato apropiado y justo a las personas. Es también necesario  no excluir a nadie de esta consideración, muy a pesar de que algunos, como nuestro protagonista de turno, tiene por costumbre -y de larga data-  el irrespeto que le fluye sin el menor recato ni moderación. 


¿Los dos relojes serán por cábala?
Su protagonismo exageradamente mediatizado hizo que  días atrás, el pasado martes 27 de julio,  los medios de todo el mundo se hicieran  eco de una  decisión de la Asociación del Fútbol Argentino, en la cual informaba a la opinión pública,  de la no renovación del contrato como  técnico de la Selección Nacional y de esa manera poner punto final a su gestión que lució para ellos y para muchos otros, frustrante e ignominiosa en demasía. . Los aficionados de todo el mundo, en su gran mayoría daban como favorita a la escuadra argentina, llena de figuras de primera magnitud, de reconocida y destacada actuación en los principales equipos europeos. 
En amena conversación con Hugo Chávez


Sin embargo esa selección  tenía una piedrita en el zapato, -en opinión de los que saben y que compartimos ampliamente-  y  esa circunstancia despertaba inobjetables dudas en su desempeño. Tal piedrita tenía por nombre, Diego Armando Maradona, el responsable absoluto de esa selección, que con sus desplantes, incoherencias, soberbias y su incapacidad como técnico, preenjuiciaba la efectividad argentina.  Suponemos que la noticia no sorprendió casi a nadie, con la excepción del personaje que ocupa estas líneas.


Maradona besándole la diestra a Fidel Castro. 
 Es difícil de comprender las actitudes desquiciadas  y absurdas de aquellos en que se escondieron tras la fama para ocultar sus miserias y sus carencias. El  otrora admirado y hábil jugador de fútbol que con su destreza maravillara al mundo entero  y que posteriormente echara por la borda lo conquistado para llenar de desencanto a aquellos que lo glorificaron. Nuestro personaje se ha ocupado desde hace ya tiempo en juntar todo aquello que encuentra a su paso (lo bueno y lo malo) y meterlo en un mismo saco para después mezclarlo sin la menor discreción, ni consideración.. 


Disfrutando del ocio y del  tabaco cubano 


  Con la dignidad, la vergüenza y el recato podemos llegar a cualquier parte y con ellos siempre saldremos airosos de toda situación por desfavorables que estas fueran. Correcto hubiera sido que Maradona se hubiera percatado de su innegable ceguera luego del tercer gol alemán, cuando remontar ese resultado era decididamente imposible y al finalizar el partido y ante el irreparable y estruendoso fracaso, -además del  perfectamente aceptable llanto que mostrara- asumir la mea culpa y sin dilación y con humildad  “colgar los botines” a su gestión y hacerlo saber para consuelo de aquellos que confiaron en su misión. 
--¡¡¡Qué pasó referí, no vió el penal?!!!


 Esa hubiera sido una actitud sobradamente honorable y digna. Reiteradamente persiste  una y otra vez en demandarles a otros las causas negativas de sus propios caprichos o ineptitudes. El pasado miércoles convocó a una conferencia de prensa en la que acusó de mentirosos y traidores a los que decidieron su alejamiento de la selección.  También culpa al azar o a la mala suerte los  bochornosos  cuatro goles que dieron al traste las esperanzas albicelestes y esa creencia persiste en su mente.
Un momento de amor...


 La soberbia obnubila la razón y nos hace creer que somos infalibles. Es tanta la magnitud del desafuero psicológico de estas personas, que se vuelven incapaces de tolerar la menor crítica  y menos aún de plantearse la autocrítica.  A esta altura, cuando ya el Mundial de Fútbol de Sudáfrica pasó a la historia y  España con toda gloria se consagró Campeón del Mundo,  solo queda el recuerdo de lo acontecido  y la reflexión.
 Muchos equipos cumplieron una loable actuación a pesar de precariedad de sus recursos que acompañaron con la grata humildad de sus personas.
Diego Forlán, el mejor jugador del mundial.


La selección uruguaya alcanzó un merecido  cuarto puesto en la clasificación, demostrando al mundo que es posible obtener resultados si hay dedicación y voluntad. Ya para terminar amables lectores es necesario realzar aquello que valoriza y sustenta el aprecio por la vida. Para ello tomamos la agradable personalidad del técnico de la selección campeona,  Vicente del Bosque quien  ha demostrado una amable sobriedad en sus actitudes y declaraciones que reflejan un temperamento lleno de méritos y de laudable  sencillez al alcanzar el título de más importancia en el deporte mundial: 
Vicente del Bosque, de lo bueno, lo mejor!


“Es un momento inolvidable, felicitamos a Holanda que nos ha hecho muy difícil el partido, esta final ha premiado al buen fútbol y es el éxito de todos…” 


Material gráfico, agradecimientos a:  noticias mdq.com  sadiosantafe.com   portalplanetas.edna.com.ar   desarmandomaradona.blogspot.com   aberlanga.blogspot.com   foroacb.com   latribuna.hn   actualidafutbol.com   elconfidencial.com   pasionalbiceleste.com.ar   totalnews.com.ar   pulgamessi.com


                            El inconfundible rostro de la humillación, la frustración y la tristeza
Leonel Messi, considerado el mejor jugador del mundo, anulado en su desempeño en el Mundial de Sudáfrica,  por la ineptitud, la soberbia y la irresponsabilidad de su entrenador...