Juan Yáñez
Publicado en el Diario La Antena de San Juan de los Morros, Venezuela el 31 de mayo de 2011
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Carlos Calderón ejecutando el Concierto para Violín de Meldensohn en la sala de los Baños Termales de San Juan de los Morros |
Después del silencio, lo que está más cercano a Dios es la música…
Obras son amores y no buenas razones.., dice aquel inmortal adagio y será a partir de esta sugestiva cita, que intentaremos enaltecer en el presente texto a una encantadora musa, que los antiguos griegos llamaron: Euterpe, que se expresa en la naturaleza por medio del sonido y no es otra suprema majestad que LA MÚSICA.
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Euterpe, la musa de la música
para los antiguos griegos |
Es La Música, amables amigos y consecuentes lectores, el sublime y majestuoso encanto que se ahonda en el alma, nos conmueve, maravilla, emociona y es a través de compositores e interpretes con sensibilidad, talento y oficio, que impone su amena presencia y nos cautiva sin misericordia. La pasada semana, precisamente en la noche del viernes 20 del corriente, Euterpe, dejó una vez más su morada en El Parnaso, -el reino consagrado a las musas, se dirigió a Venezuela; precisó a San Juan de los Morros y posó todo su delicado encanto en el Salón Cristal de los Baños Termales. Allí se escenificaba un concierto de la Orquesta Sinfónica del Estado Guárico, una excelsitud que muchos sanjuaneros desconocen o que la indiferencia vernácula hace subestimar y que es, -lejos de toda exageración- el principal puntal de la cultura guariqueña y una de las mejores orquestas sinfónicas de Venezuela y no decimos más para que no nos tilden de adulantes o presumidos.
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La Orquesta Sinfónica del Estado Guárico |
Hay algo más aún que decir sobre aquella inolvidable noche, amigos lectores, por lo pronto lamentamos sinceramente que muchos de ustedes se hayan perdido esa memorable velada. Para ellos reviviremos el evento con palabras y de esa manera sepan lo allí acontecido. Empezaremos diciendo que muchos de ustedes y nosotros tenemos el grato privilegio de habitar esta ciudad, donde hemos tenido cobijo, haber nacido nuestros hijos y nietos, bregar, hecho vida, sembrar y recoger; lograr identificamos afectivamente con ella y con todos los sanjuaneros. Aquí no somos muchos, nos conocemos todos o casi y seguramente pocos ignorarán la existencia de la familia Calderón. Para aquellos que no la conocen, referiremos que es una tradicional, aunque joven familia sanjuanera, particularmente unida y con firmes valores humanos, formada por los esposos Edgar y María Calderón y sus seis hijos.
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Los esposos Calderón, luego del concierto posando con su hijo Carlos |
Es un hogar como todos sin embargo posee un distintivo no casual y sorprendentemente grato: Sus vástagos, los seis hermanos Calderón son, la totalidad de ellos músicos académicos con firme vocación, y con suficientes méritos profesionales, que los han hecho integrar connotadas orquestas sinfónicas de Venezuela, que brillan aquí y por todo el mundo. En este concierto que hacemos mención, Carlos Alberto Calderón, el menor de los varones, se presentó con una especial intervención en la Orquesta Sinfónica del Estado, actuando como solista invitado.
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El director invitado, Maestro Norman Gómez |
Es este músico un animoso joven de 18 años, lleno de entusiasmo, virtudes profesionales y por sobre todo un artista de promisorio futuro. Carlos Alberto Calderón lució con su violín como un precoz veterano, aquí en la tierra que le viera nacer, crecer y que ama con sus más caros afectos. Pendiente estaba este encuentro desde el momento en que se separara de su familia, amigos y compañeros para cultivarse profesionalmente en instituciones caraqueñas, acrecentar sus conocimientos, para ahora regresar, mostrarnos lo alcanzado al brindarnos un magnífico concierto que encantó al público; donde se lució con una ejecución impecable, apasionada y reveló un exquisito sonido.
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Público asistente al concierto |
El programa de esa inolvidable noche incluía dos piezas de renombre. La primera el Concierto para Violín y Orquesta de Mendelsohn, pieza clave que marca pautas para los violinistas, que interpretara como solista Carlos Calderón. La segunda, la Sinfonía Nº 1 de Tchaikovski.
Ambas obras interpretadas como ya hemos apuntado por la Orquesta Sinfónica del Estado Guárico y que condujera un estupendo director invitado, el maestro Norman Gómez. La ejecución y dirección, tanto de una como de otra partitura fue de una calidad insuperable, digna de las mejores orquestas del orbe, en particular la Sinfonía de Tchaikovski, composición de muy compleja y exigente interpretación. Con anterioridad al concierto tuvimos oportunidad de conversar con Carlos Alberto, a quien conocimos desde sus comienzos y notamos que el tiempo no ha pasado en vano.
Descubrimos en él una personalidad ya lo suficientemente madura para dedicarla por entero a la música y profundizar en ella.
Actualmente forma parte en la fila de los primeros violines en la Orquesta Juvenil Teresa Carreño, en Caracas. Tuvo oportunidad de participar en la primera gira internacional de esta orquesta en que visitaron varios países europeos. Fue dirigido por renombrados directores de la talla de Sir Simón Rattle, Gustavo Dudamel, Sung Kwak y en especial por el maestro venezolano Miguel Ángel Monroy, reconocido kappelmeister en Alemania durante muchos años y actualmente a cargo de nuestra orquesta guariqueña, lo que significa, -en especial mención- un honor para San Juan de los Morros, con escasos precedentes.
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El afamado maestro Miguel Angel Monroy al centro, rodeado por el autor y el Sr. Bruno Santangelo |
Nos informó Carlos Calderón que continúa estudios en la Academia Latinoamericana de Violín con el maestro Sergio Celis y ha comenzado recientemente estudios de dirección orquestal en Unearte con el maestro Rodolfo Saglimbeni. Compartimos con Joseph Renan, cuando expresara su acertado juicio: “La juventud es el descubrimiento de un horizonte inmenso, que es la Vida”. Eso es lo que vimos en el joven Calderón y en los demás músicos que forman parte de nuestra nunca suficientemente ponderada Orquesta Sinfónica del Estado Guárico. La orquesta presenta un concierto cada dos semanas y es de primordial importancia, para nuestros músicos, la presencia de público para inspirarles, como también apreciarles y alentarles Desde esta columna y con el mayor entusiasmo los invitamos a asistir a los venideros conciertos, la entrada es totalmente gratuita, pasaran por una agradable y gratificante experiencia musical…
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Eleazar Yáñez, elocuente Maestro de Ceremonias |
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El joven solista al finalizar su presentación |
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Recibiendo las felicitaciones del público |
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Carlos Calderón y sus padres presenciando la segunda parte del concierto |
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El concertino de la Orquesta Sinfónica del Estado Guárico,
Jorge, el mayor de los varones de los hermanos Calderón
Material gráfico: launidadesdiversidad.blogspot.com vivirporlamusica.wordpress.com y del autor. |